Parece que cada vez hay más convencidos de que las organizaciones han de volverse agile.

Pero….¿por qué?

La elevada incertidumbre del mercado multiplicado por la velocidad a la que cambian las cosas hace que las organizaciones tengan que ser mucho más veloces a la hora de adaptarse a nuevos entornos para no quedarse obsoletos.

Hay claras ventajas que hacen que cada vez más organizaciones estén en proceso de transformación como pueden ser BBVA, Santander, Roche…

• Mejora de la eficiencia mediante organizaciones más planas, donde se crean equipos transversales y donde hay un responsable por proyecto.Se eliminan así ineficiencias fruto de las jerarquías interminables en grandes organizaciones.

• Mejora en la aportación de valor de cada individuo. Al crearse equipos multidisciplinares, se consigue mayor enriquecimiento. Las personas involucradas alcanzan un mayor conocimiento del negocio en el que trabajan y la mezcla de perspectivas, hacen que haya un mayor enriquecimiento del output final.
• Meritocracia y auto liderazgo. Las personas tienen diversos motivadores en el ámbito laboral, uno de ellos es el reconocimiento del esfuerzo, que no siempre es posible en organizaciones muy jerarquizadas.

Al crear una organización más plana se logra mayor visibilidad de determinadas personas, donde el esfuerzo de cada individuo tiene un impacto directo y en tiempo real.

En una organización agile, el que trabaja y se esfuerza adquiere visibilidad y, por tanto, tiene mayores probabilidades de que sea reconocido.

Aunque el concepto y las metodologías agile vienen del mundo de la tecnología, no funciona sin las personas y la parte más humana de las organizaciones.

Es más, las verdaderas transformaciones agile de las compañías funcionan cuando el área de RRHH está involucrada y es capaz de conseguir una transformación cultural profunda.

Sin las personas no es posible lograr una verdadera transformación agile. Supone una evolución hacia modelos de negocio/liderazgos totalmente diferentes, donde la función de Recursos Humanos es fundamental.

¿En qué debemos trabajar desde RRHH para facilitar y dar apoyo a las organizaciones ágiles?

• Selección: incorporar perfiles que se adapten a estas nuevas formas de trabajo, que sean diversos para poder aportar mayor valor al negocio desde formas de pensar distintas y que tengan pensamiento crítico.
• Redefinir las políticas de RRHH, modificar la forma de evaluar a los empleados, definir nuevas competencias alineadas con la filosofía ágil, etc.
• Desarrollo: dar las herramientas necesarias a los empleados actuales, para que desarrollen nuevas habilidades permitiéndoles trabajar en un entorno totalmente colaborativo.
• Lugar de trabajo, configuración de espacios de trabajo abiertos.
• Etc

Tenemos un precioso reto por delante

Gadea Zumárraga